Estas son las 8 tendencias de 2022 en Recursos Humanos

Claudia Pavez Souper
Periodista, magister en Dirección de Personas y Desarrollo Organizacional
Directora en Comunicativa.cl

Si hay algo de lo que todos estamos seguros en el área de Recursos Humanos es que nos movieron el piso, todo cambió y ahora las competencias o estrategias de los líderes para lograr los resultados esperados son muy distintos que antes del estallido social, la crisis sanitaria y los vaivenes la actividad política nacional.

Algunos de los cambios que seguiremos viendo durante este año 2022 son: la prioridad del bienestar de los colaboradores, antes de la pandemia no lo entendíamos mucho; pero es realmente impensable la productividad sin personas sanas física y mentalmente. Aquí nos referimos a las personas de nuestro entorno, nuestras comunidades más cercanas y nuestros colaboradores directos.

La segunda tendencia es la confianza y para que esta se produzca necesitamos a líderes preparados, que busquen la lealtad de su equipo y que trabajen por dar alguna estabilidad a los colaboradores, aunque las condiciones económicas continúan proporcionando incertidumbre. Esto demanda de los jefes un cambio en las habilidades hacia aquellas más adaptativas.

La automatización llegó para quedarse en diversos rubros y claramente es fundamental para suplir la “escases de talento”, y así como en procesos más industriales, en recursos humanos también aporta y le deja la más creativo a las personas.

Como los más jóvenes tienen miradas nuevas sobre cuando y dónde trabajar, se hace indispensable diseñar un ciclo de vida de los colaboradores, que sean flexibles, que consideren formas de negociación y oportunidades de desarrollo distintas o adaptadas a cada uno.

Las nuevas tecnologías y la digitalización llegaron para quedarse, ya que mostraron todo su potencial durante los tiempos de cuarentenas y trabajo remoto. Para recursos humanos debe ser un imperativo este año 2022 continuar trabajando en garantizar que las personas asuman como parte de su cultura y vida diaria la convivencia con las plataformas y sistemas, desde aquellas para seleccionar y contratar, las de aprendizaje y desarrollo, entre otras.

Si antes del estallido social veníamos conversando de equidad, diversidad e inclusión, ahora es un deber de las organizaciones. Deben centrarse en las competencias y no en las características personales, esto permitirá atraer más talentos y evitará la fuga de estos. Pero, lo que es mejor, en un equipo con un mix de edades, género, niveles educacionales y culturales, tenemos más probabilidades de alcanzar el alto desempeño si logramos que las diferencias sean una ventaja.

Este 2022, ya estamos viendo que son necesarios datos sobre todos de cada uno de los colaboradores, mientras más al día estén esos datos podremos tomar decisiones más rápidas y objetivas; pero sobre todo, las adecuadas para permitir que nuestro equipo esté sano.

En momentos en que “cazar” talentos está más complicado, la fuerza de los hechos nos recuerda duramente que la ética y la búsqueda del impacto positivo tienen un lugar de la mayor relevancia para los postulantes. Por eso es tan importante trabajar la marca empleadora, desde lo que somos de verdad y si lo que somos no es atractivo habrá que mejorar para lograr los objetivos de nuestra organización. Y siempre se puede hacer ese camino para ser mejores para este planeta y nuestro entorno.